La final de Mayor de París Una vez más destacó la misma observación: Tapia y Coello son por el momento intocables ante Galán y ChingottoCuarta derrota consecutiva, sólo una victoria en un año... la rivalidad se inclina mucho hacia un lado.

Chingotto bajo presión

Alejandro Galán, logra sostener el duelo con Agustín Tapia. Pero a su lado, Federico Chingotto sufre mucho ante la situación Arturo CoelloEl zurdo impone su potencia y constantemente presiona al argentino en defensa. Incluso en condiciones de juego que se supone le favorecen, como en Roland Garros con peloteos más largos, Chingotto no ha encontrado la solución. Voleas, coberturas, trabajo defensivo: sigue siendo excepcional... pero ¿es suficiente para competir con la dupla número uno? Por ahora, la respuesta es no.

Una rivalidad desequilibrada

Ante dos atacantes tan completos como Tapia y Coello, Galán y Chingotto deben forzar su juego. El español se ve obligado a arriesgar más para asegurar puntos, mientras que el equipo contrario tiene un equilibrio natural: Tapia y Coello pueden alternar sin jugar demasiado. Esta diferencia estructural pesa mucho en los partidos importantes.

¿Debería Galán considerar otro perfil?

La pregunta no es sencilla. Chingotto sigue siendo uno de los mejores jugadores del mundo, posiblemente el defensor más fiable del circuito. Pero en su búsqueda del trono, Galán podría tener que considerar un compañero más agresivo para romper la jerarquía.
En las discusiones circulan varios nombres:

  • pablo cardona, un zurdo potente, con un perfil similar a Coello, pero muy abajo en el ranking.
  • Mike YanguasEn pleno progreso, capaz de escribir muy bien.
  • Jon sanz, ya asociado durante una corta temporada a Galán en el pasado, con quien ya ganó a Tapia y Coello.

En cuanto a Juan LebrónLa hipótesis parece haber sido descartada por el momento después de sus tormentosas separaciones.

¿Continuar o cambiar?

Galán y Chingotto forman una dupla sólida, consistente y competitiva. Pero para vencer a Tapia y Coello en la gran final, la fórmula parece limitada. ¿Deberían romper una dupla que, en general, funciona bien para intentar algo más atrevido? La pregunta sigue abierta.

Benjamín Dupouy

Descubrí el pádel directamente durante un torneo y, francamente, al principio no me gustó mucho. Pero la segunda vez fue amor a primera vista y desde entonces no me he perdido ni un solo partido. Incluso estoy dispuesto a quedarme despierto hasta las 3 a. m. para ver el final de Premier Padel !