Los jóvenes jugadores Lou Lambert Agosti (35.º) y Kimy Barla (20.º) vivieron un año 2024 rico en lecciones y resultados prometedores. “A principios de año no tocábamos mucho juntos”, confiesa Lou. Los dos socios habían decidido separarse temporalmente para adquirir experiencia con otros jugadores. Una estrategia que dio sus frutos, ya que su regreso juntos estuvo acompañado de un primer podio en P1000. "Fue bastante positivo", añade Kimy.
El fin de año acabó por todo lo alto con buenos resultados en P1500 y P1000. Aprovechamos el FIP BRONZE Mondeville en PadelShot Caen para entrevistar a los dos jugadores que cada vez están más implicados en el circuito.
Un regreso para 2025
2025 promete ser el año de su “verdadero regreso” como pareja oficial. “Normalmente tocamos juntos todo el año”, confirma Kimy. Los dos jugadores también apuntan a nivel internacional con su primer torneo FIP en Caen. “Tenemos que adelantarnos a esto”, explica Lou, destacando la importancia de adquirir experiencia en el escenario mundial.
Progreso estratégico y mental.
Ambos socios elogian su desarrollo mental y técnico. "Somos más pacientes y regulares que antes", señala Lou. El trabajo mental fue un elemento clave en su progreso. “Antes nos rendíamos demasiado rápido. Hoy luchamos hasta el final”, reconoce Kimy. Aunque todavía queda un largo camino por recorrer, es evidente que han dado un giro decisivo en términos de concentración y comunicación sobre el terreno. “Antes ya no nos hablábamos durante determinados partidos. Ahora es mucho mejor. »
Los retos de un circuito femenino en construcción
Preguntados sobre la escasa diversidad de parejas femeninas en competición, Lou y Kimy reconocen un problema común en el pádel y el tenis. “A menudo jugamos contra los mismos jugadores, pero mientras no los derrotemos a todos, podemos ganar experiencia”, Lou pone las cosas en perspectiva. Sin embargo, esperan que el ecosistema del pádel femenino siga desarrollándose.
Del tenis al pádel: un cambio salvador
Los ex tenistas Lou y Kimy han encontrado un nuevo impulso en el pádel. “El tenis se había convertido en una saturación”, confiesa Kimy, refiriéndose a una mentalidad demasiado dura en el circuito. Para Lou, el paso al pádel fue un soplo de aire fresco: “Como pareja, no quieres decepcionar a tu pareja. Me ayudó mucho mentalmente. »
Objetivos para 2025: subir la escalera
Para 2025, las ambiciones son claras: asegurar su primera P1000 y llegar aún más lejos P1500. “A menudo nos quedamos estancados en cuartos de final, pero ahora estamos decididos”, subraya Lou. Con determinación renovada y objetivos bien definidos, Lou y Kimy pretenden dejar su huella en esta nueva temporada.
Franck Binisti descubrió el pádel en el Club des Pyramides en 2009, en la región de París. Desde entonces, el pádel forma parte de su vida. Se le ve a menudo recorriendo Francia cubriendo los principales eventos del pádel francés.